En la actualidad, la pandemia originada a raíz de la rápida propagación del COVID-19 ha transformado la manera de ejecutar las tareas laborales dentro de las organizaciones. Una de las modalidades en auge -aunque no nueva- es el trabajo remoto, el cual permite la realización de las actividades productivas de los trabajadores, sin la necesidad de salir de su casa.
De acuerdo con una encuesta aplicada en marzo por Randstad Chile, un 72% de las empresas consultadas aplicó el trabajo a distancia; un crecimiento evidente, considerando que solo el 31% declaró tener una modalidad similar en junio de 2019.
5 sugerencias y herramientas de productividad personal en el teletrabajo
La nueva modalidad significa que los trabajadores, ante esta novedosa rutina laboral, adquieran algunas habilidades y hábitos para que el modelo tenga éxito.
¿Cómo cuáles? A continuación, algunas técnicas que ayudarán a mejorar la productividad personal fuera del espacio clásico de trabajo:
1. Designar un espacio físico
Para potenciar la motivación, es importante crear un ambiente laboral. Para ello, resulta necesario acomodar un lugar tranquilo de la casa como oficina, donde se eviten las distracciones -en el horario de trabajo- relacionadas con la convivencia con la familia y las tareas básicas del hogar.
Por otro lado, acciones simples como darse un baño antes de empezar y ponerse algo cómodo, pero apropiado, ayuda a evitar la pereza y a prepararse para trabajar.
2. Desarrollar rutinas
Si no se fijan horarios de inicio y fin de jornada en el trabajo remoto, se tendrá la equívoca y perjudicial sensación de estar todo el día trabajando y que no se está avanzando apropiadamente.
Planificar las actividades de cada día, incluido los descansos, y designar las primeras horas laborales a la realización de tareas más complejas, ayuda a mejorar la productividad personal y a trabajar con la intensidad que requieren las actividades diarias.
3. Familiarizarse con la tecnología
El trabajo colaborativo y remoto no es posible sin herramientas tecnológicas que ayuden a desempeñar las funciones de cada colaborador y a comunicarse con el resto de los compañeros y superiores.
Los software para videollamadas, las plataformas digitales para reuniones o los programas con herramientas específicas que fomentan el flujo de comunicación entre el personal, y potencian la productividad -como Excel, por ejemplo- requiere de las habilidades básicas para su correcto uso.
De ahí que es de vital importancia una capacitación continua -mediante cursos especializados- que propicie el aprendizaje de estas herramientas.
4. Incrementar la eficiencia personal
Para evitar distracciones y poder separar la vida privada de las horas de trabajo, se pueden probar tácticas como: silenciar las notificaciones que no sean por temas laborales, voltear la pantalla del celular, y evitar el acceso a redes sociales mediante bloqueadores de sitios web.
Además, existen herramientas de productividad personal que ayudan a mantener el enfoque y la agilidad mental; como la “técnica Pomodoro”, que consiste en la segmentación del tiempo laboral en bloques de 25 minutos, en el cual cada bloque es acompañado por descansos de 5 minutos.
Según Ellie Wilson, cofundadora del servicio de asistente virtual Virtalent, "estar encerrado sin parar para un descanso puede significar que tus niveles de productividad disminuyan, que te canses más y estés menos motivado para completar lo que está trabajando".
5. Trabajar en la comunicación efectiva con compañeros y superiores
La comunicación efectiva, es decir, "aquella que utiliza adecuadamente las herramientas disponibles y que se acopla al contexto para lograr que el mensaje aterrice de la manera que esperamos", es indispensable para lograr el trabajo colaborativo y remoto, además de conseguir las metas profesionales.
El que se consiga esta habilidad -además de la redacción eficiente y asertiva, por ejemplo- es de importancia en ejecutivos que dirigen grupos de trabajo y están a cargo de la gestión de personas, para que puedan así ejercer su liderazgo y la conducción de metas organizacionales.
Aunque la productividad en el teletrabajo suele tener registros positivos, existen empresas que declaran que ocupando esta modalidad han tenido que producir por debajo del 25% de su capacidad.
Para evitar esto, como trabajador es importante que ante las nuevas situaciones se esté en constante perfeccionamiento de las habilidades necesarias para el teletrabajo, tanto en el área informática como en el desarrollo integral de la profesión. Solo así se puede conseguir una buena posición en el mercado laboral cambiante.