Cuando trabajan, las personas demuestran habilidades blandas y duras. Una combinación de ambas resulta clave para el crecimiento laboral. Por tal motivo, es importante saber cuál es la diferencia entre los dos conceptos y qué está buscando el mercado actualmente.
Al hablar de habilidades duras, se hace referencia a aquellas técnicas que sirven concretamente para realizar una determinada tarea o cumplir una función. Generalmente, se aprenden por medio de formación académica o experiencia laboral.
Un ejemplo de estos conocimientos, también denominados hard skills, puede ser que un mecánico sepa cómo funcionan las distintas partes de un vehículo para poder repararlo.
¿Qué son las habilidades blandas?
Las habilidades blandas, en tanto, no están relacionadas directamente con una profesión o cargo.
Básicamente, tienen que ver con rasgos de la personalidad de un trabajador: la manera en que cumple su función, su inteligencia emocional y de qué manera establece vínculos con compañeros, superiores, subordinados o clientes.
Habilidades blandas: ejemplos de las más buscadas en el mercado
Consultoras de recursos humanos como Randstad y Adecco coinciden en cuáles son las habilidades blandas más requeridas por las empresas en la actualidad.
1. Trabajo en equipo
Para que se cumplan los objetivos de un proyecto, resulta clave que quienes lo integran posean una actitud colaborativa y respetuosa entre sí.
De esta forma, cada uno podrá aportar lo mejor de su parte.
2. Comunicación
Para que un grupo funcione, también es importante que sus miembros tengan un diálogo y se entiendan.
Por ello, un empleado debe saber escuchar y también ser claro al momento de expresarse.
3. Resolución de problemas
La capacidad de análisis y acción ante un conflicto se presenta como un indicador que determina si un trabajador puede asumir puestos de liderazgo o con más responsabilidades de las que posee.
4. Gestión de tiempo
Resulta fundamental que un empleado sepa organizar su día: saber qué tareas tienen más prioridad que otras y asignarles un tiempo estimado a cada una.
5. Pensamiento creativo
Además de aportar ideas útiles, contar con este atributo está relacionado con los dos puntos anteriores, ya que es una alternativa para resolver problemas y administrar el tiempo correctamente.
6. Flexibilidad
En una época en la que muchas organizaciones empezaron a implementar herramientas como el home office, la capacidad de los colaboradores para adaptarse a cambios como trabajar de forma remota ha cobrado valor.
¿Se pueden aprender habilidades blandas?
Si bien este tipo de atributos suelen ser innatos en una persona o se van incorporando con la experiencia laboral, existen alternativas para poder potenciar las habilidades blandas.
Ejemplos de cursos como los de Capacitación y Desarrollo UC se enfocan en técnicas para el desarrollo profesional y les sirven a los trabajadores para adquirir ciertas destrezas demandadas por el mercado.
Dentro de sus programas, se pueden encontrar capacitaciones para alcanzar un crecimiento laboral mediante elementos claves, como la comunicación, el liderazgo, la programación neurolingüística, el protocolo para relaciones públicas y la redacción, entre otros.